Celebramos el 4º Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos
Vivimos en un mundo donde millones de personas se enfrentan la amenaza del hambre todos los días.
La mayoria somos conscientes de que cada año se desperdician cantidades asombrosas de alimentos en todo el mundo, y que son muchas las comunidades que luchan por acceder a comidas nutritivas, ¡y no siempre en lugares remotos del planeta!
El desperdicio de alimentos es un problema global con un impacto directo tanto en comunidades remotas, como en grupos marginales (y no tan marginales) de nuestro entorno.
Ante la necesidad imperiosa de recordarnos a todos la importancia de reducir el desperdicio de alimentos y garantizar que los recursos alimentarios se utilicen de manera responsable, la comunidad internacional ha designado el 29 de septiembre como el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos: una oportunidad para reflexionar sobre la magnitud del problema y para unirnos en un esfuerzo conjunto para abordarlo.
En este artículo, exploraremos la importancia de este día y cómo cada uno de nosotros puede desempeñar un papel activo en la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos en nuestras vidas diarias y en nuestras comunidades.
Junto/as, podemos trabajar hacia un mundo donde todos tengan acceso a alimentos suficientes y nutritivos, mientras cuidamos nuestro planeta y sus recursos limitados.
¡Únete a nosotros en la celebración del 4º Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos y sé parte del cambio positivo que tanto necesitamos!
Día Int. Concienciación Pérdida y Desperdicio de Alimentos: Orígenes
El Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos es una fecha crucial que se celebra cada 29 de septiembre con el objetivo de crear conciencia sobre el problema global de la pérdida y el desperdicio de alimentos.
El primero de estos días se estableció en 2019 a través de una resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas. La fecha del 29 de septiembre fue elegida en honor al Día Mundial de la Alimentación, que también se celebra en esta fecha.
El propósito de esta iniciativa es destacar la importancia de reducir las pérdidas de alimentos en todo el mundo y fomentar acciones concretas para combatir este problema.
Se intenta también, sensibilizar a nivel global sobre la magnitud del problema de la pérdida y el desperdicio de alimentos, y promover la toma de medidas a todos los niveles, desde el gobierno hasta las comunidades y los individuos, para reducir el desperdicio de alimentos y garantizar una distribución más equitativa de los recursos alimentarios.
A través de la educación, la promoción de prácticas sostenibles, la colaboración, e incluso el uso apropiado de la tecnología, podemos marcar la diferencia en la lucha contra el desperdicio de alimentos y contribuir al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
La pérdida y desperdicio de alimentos: un problema global
Al hablar de la pérdida de alimentos nos referimos a la disminución de la cantidad o calidad de los alimentos a lo largo de la cadena de suministro, desde la producción hasta la distribución y el consumo.
El desperdicio de alimentos, por otro lado, ocurre cuando los alimentos comestibles se descartan o se dejan en mal estado en lugar de ser consumidos.
La pérdida y el desperdicio de alimentos son problemas globales significativos que, como puedes ver a continuación, afectan a nivel económico, social y ambiental:
Pérdida de alimentos en la cadena de suministro: Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), aproximadamente un tercio de todos los alimentos producidos en el mundo se pierden o desperdician en la cadena de suministro alimentario. Esto equivale a alrededor de 1.3 mil millones de toneladas de alimentos anualmente.
Desperdicio de alimentos en hogares y restaurantes: A nivel de consumidores finales, se estima que alrededor del 40% del desperdicio de alimentos ocurre en hogares y restaurantes. En países desarrollados, gran parte de esta pérdida se debe a la compra excesiva, las fechas de caducidad pasadas desapercibidas y la falta de consumo de sobras.
Impacto económico: La pérdida y el desperdicio de alimentos tienen un costo económico significativo. Se estima que este desperdicio representa un valor de alrededor de 1 billón de dólares estadounidenses anuales. Esto afecta tanto a productores como a consumidores, y puede aumentar los precios de los alimentos.
Impacto ambiental: La producción de alimentos que nunca se consumen tiene un impacto ambiental considerable. La producción de alimentos que se desperdician contribuye significativamente a la emisión de gases de efecto invernadero, además de utilizar recursos naturales como agua, tierra y energía.
Hambre y desnutrición: A pesar de la cantidad de alimentos producidos en el mundo, todavía existen millones de personas que sufren de hambre y desnutrición. La pérdida y el desperdicio de alimentos podrían abordar parte de este problema al hacer que los alimentos disponibles sean más accesibles para quienes los necesitan.
Desperdicio de recursos: La pérdida de alimentos no solo significa la pérdida de comida, sino también de los recursos utilizados en su producción, como agua, tierra y energía. Esto agota recursos valiosos y tiene un impacto negativo en la sostenibilidad.
La reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos es un objetivo clave de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS).
El ODS 12.3 busca reducir a la mitad el desperdicio de alimentos a nivel mundial para 2030 para lograr la seguridad alimentaria y promover un uso más eficiente de los recursos naturales.
Durante el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, se promueven diversas actividades y campañas destinadas a educar a las personas sobre cómo reducir el desperdicio de alimentos en sus hogares, así como a fomentar la adopción de prácticas sostenibles en la producción y distribución de alimentos a nivel global.
29.9.2023: Cuarta edición
Este 29 de septiembre 2023 celebramos la cuarta edición de este día, y la FAO ha preparado la versión actualizada de la guía «Involúcrate» para el IDAFLW 2023.
En este documento encontrarás datos y mensajes clave y acciones de prevención de la pérdida y el desperdicio de alimentos para organismos públicos, empresas privadas, y consumidores.
Este año, se sigue haciendo un claro llamamiento a la acción del sector público y privado para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos, con un énfasis especial en la transformación de los sistemas agroalimentarios y la contribución a la consecución de la Agenda 2030.
En la actualidad, muchos de los sistemas agroalimentarios mundiales son insostenibles, ya que degradan la tierra agrícola, contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero, la pérdida de biodiversidad y el consumo de agua subterránea.
Los sistemas alimentarios también son vulnerables a los impactos climáticos y otros choques externos, en parte debido a su impacto en el medio ambiente.
Se requiere acción para transformar los sistemas agroalimentarios a nivel mundial, mejorar su resiliencia, eficiencia, sostenibilidad e inclusión de formas que impacten positivamente en la seguridad alimentaria, permitan dietas saludables y contribuyan a mejores resultados nutricionales.
Todo esto debe lograrse, sin embargo, manteniendo un equilibrio para mitigar los efectos sobre nuestra base de recursos naturales (tierra, agua, biodiversidad) y el clima.
La reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos puede desempeñar un papel clave en la transformación de los sistemas agroalimentarios al aumentar la disponibilidad de alimentos, contribuir a la seguridad alimentaria, dietas saludables y construir la resiliencia necesaria.
La reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos también sirve como una estrategia climática clave al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), ayudando a los países y a las empresas a elevar la ambición climática, al tiempo que conserva y protege nuestros ecosistemas y recursos naturales de los cuales depende el futuro de los alimentos.
¿Cómo puede ayudar Andy a reducir el desperdicio de alimentos?
Andy, el asistente digital referente de la hosteleria y el foodservice, simplifica y digitaliza todas las tareas relacionadas con la gestión del desperdicio alimentario, lo que ahorra tiempo y esfuerzo para tu equipo en la cocina:
Hojas de producción diaria: Ya no es necesario rellenar manualmente las hojas de producción diaria. Andy automatiza este proceso y almacena los registros de todos los restaurantes de forma organizada y digital. Esto significa que cualquier miembro del equipo, gerente o inspector externo puede acceder a estos registros en tiempo real.
Registro de caducidades: Andy realiza cálculos automáticos de las fechas de caducidad y crea etiquetas con información relevante que puedes imprimir fácilmente. Esto ahorra tiempo, reduce errores y mantiene registros accesibles y unificados.
Registro de temperaturas: Simplifica la labor de registrar las temperaturas. Andy identifica alertas y propone acciones en caso de problemas. Esto elimina la posibilidad de errores en las temperaturas y proporciona información en tiempo real para auditorías internas y externas.
Registro de mermas: Andy guía a los empleados en la gestión de taras y mermas, mostrando las diferencias entre el stock real y el registrado. Esto proporciona un control absoluto de los productos en tiempo real y evidencias para cumplir con las regulaciones sanitarias.
Recepción de materia prima: Facilita la recepción de materias primas, asegurando que lleguen en las condiciones adecuadas. Andy simplifica estas tareas, reduce el tiempo invertido, elimina errores humanos y garantiza la accesibilidad de los datos en tiempo real.
Registro de donaciones: Gestiona las donaciones de alimentos de manera eficiente. Andy registra información sobre a qué entidad se dirigen las donaciones, las cantidades y el método de transporte, lo que facilita el cumplimiento de las regulaciones.
Mantenimiento de equipos e instalaciones: Andy verifica el buen funcionamiento de los equipos e instalaciones, alertando al equipo en tiempo real ante problemas y proporcionando planes de acción.
Registro de limpieza: Garantiza la limpieza y el orden en todas las áreas del restaurante. Andy guía al equipo en tareas de limpieza y mantenimiento.
Formación y actualización: Simplifica la formación y el proceso de incorporación del equipo. Andy facilita la planificación de tareas y registros, y proporciona acceso a artículos sobre seguridad alimentaria para mantener al equipo informado.
Andy se convierte en tu asistente digital en la cocina, simplificando tareas, reduciendo el tiempo dedicado a ellas y garantizando el cumplimiento de regulaciones.
Recuerda: digitalizar la seguridad alimentaria de tu restaurante o negocio foodservice,
no solo es una inversión en tu éxito a largo plazo, sino
¡también en el cuidado de las personas, y del planeta!
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